En este momento, 9 enero 2021, no hay razón para contraindicar la vacunación con el preparado de Pfizer-BioNTech en personas alérgicas a medicamentos o alimentos. Sólo estaría contraindicado en sentido estricto en personas con un diagnóstico previo de «alergia a polietilenglicol» [o a otros polisorbatos – hecho extremadamente infrecuente].
La vacunación se llevará a cabo en un centro sanitario con personal capacitado para tratar una eventual reacción adversa, es una medida prudente que cualquier persona vacunada permanezca en el centro o en sus proximidades unos 15 minutos tras la dosis – En las personas con antecedentes alérgicos este intervalo debe ampliarse a 30 minutos.
Al igual que otras vacunas debería tomarse una decisión ajustada a cada caso en – Personas con inmunosupresión, u otras alteraciones de la inmunidad, que puedan interferir con la respuesta inmune que se pretende conseguir. Tratamiento anticoagulante o procesos con riesgo de sangrado que contraindiquen la administración intramuscular de un medicamento. El asma bronquial, la diabetes mal controlada, o enfermedades crónicas con importante repercusión funcional podrían considerarse contraindicaciones en momentos de descompensación. Estos pacientes podrían recibir la vacuna una vez estabilizada su situación.
Presentar una alergia a penicilina, a analgésicos, a pólenes, a alimentos o seguir un tratamiento con corticoides en crema o inhalados no se considera una contraindicación para recibir la vacuna. El haber presentado un proceso alérgico previo y tener prescrita adrenalina inyectable tampoco impediría recibir una dosis de la vacuna. [El paciente deberá tener preparada su medicación de rescate tal como le haya indicado su médico].
Según la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica [SEIMC] los efectos secundarios más frecuentes son – Dolor en el lugar de inyección (80%). – Fatiga (60%). – Cefalea (50%). – Mialgias (30%). – Artralgias (20%). – Fiebre (10%). – Siendo todos estos de intensidad leve o moderada y desapareciendo en pocos días tras la vacunación. – Estas reacciones son más frecuentes tras la segunda dosis y su frecuencia disminuye con la edad.
En cualquier caso la vacunación no es obligatoria y es el paciente, con el consejo de su médico, el que debe tomar su decisión teniendo en cuenta que tarde o temprano todos vamos a estar en contacto con el virus parece preferible tener un contacto controlado y dirigido en forma de vacuna, con un riesgo medido, que un contacto natural no controlado que no sabemos cómo puede acabar.
Esta nota informativa se irá actualizando si existen variaciones o nuevos conocimientos que lo aconsejen.
Frases guía.-
No es necesario hacer un estudio previo a los alérgicos, por el hecho de serlo, antes de recibir la vacuna de Pfizer-BioNtech.
El asma bien controlada no supone un problema para recibir la vacuna.
Un diagnóstico previo de alergia a medicamentos no contraindica recibir la vacuna excepto si el paciente ha sido diagnosticado de alergia a polietilengicol o polisorbatos.